Ponganse las pilas

Las pilas son una cómoda fuente de energía que produce electricidad a partir de reacciones químicas, pero también una peligrosa fuente de contaminación.
Las pilas usadas y agotadas, provenientes mayormente del uso de distintos artefactos como juguetes, electrodomésticos pequeños, equipos de música, relojes, etc., representan el 0,20% de los residuos que se generan en nuestros hogares.
Algunas contienen diferentes metales en su composición, que en el caso de ser dispuestas incorrectamente una vez agotadas, podrían afectar negativamente al ambiente, incluidos los seres vivos, ya que los “metales pesados” que contienen como el mercurio, el cadmio y metales ácidos, son muy peligrosos para el medio ambiente y perjudiciales para la salud.
Por eso, el problema comienza cuando las pilas se gastan, terminan de ser útiles y hay que deshacerse de ellas, porque muchas veces acaban mezcladas con el resto de la basura y se utilizan como rellenos de terrenos en lugares próximos a las grandes ciudades. Al liberar sus componentes de mercurio o cadmio, entran en contacto con la tierra y posteriormente llegan a la napa de agua, contaminando la cadena alimentaria.

Y si son incineradas, pueden liberar a la atmósfera, contaminantes aún más peligrosos
como el vapor de mercurio que luego respiramos.

Existen diferentes tipos de pilas y no todas son igualmente riesgosas, dependiendo esto de sus componentes químicos.

· Pilas ácidas y alcalinas de óxido de manganeso de uso común y generalizado en diferentes artefactos; algunas de ellas son riesgosas por su contenido de mercurio.

·Pilas de níquel-cadmio son recargables, como las baterías utilizadas en los teléfonos celulares, constituidas por los mismos metales; dañan el medio ambiente principalmente por su contenido de cadmio.

·Pilas de óxido de mercurio principalmente de formato botón, utilizadas en equipos especiales (por ejemplo, cámaras fotográficas y relojes).
Sabiendo aun que hay una ley Nacional, la 24051, que considera a la pila, un residuo peligroso, no existen iniciativas gubernamentales tendientes a buscar soluciones concretas.

¿QUE HACER ENTONCES CON LAS PILAS AGOTADAS?
En nuestro país, por el momento, es preferible y más prudente arrojar las pilas con la basura doméstica, por cuanto ésta irá a parar a los rellenos sanitarios y contaminará menos, ya que ellos cuentan con una cobertura para que los metales y otros elementos contaminantes no pasen a las napas.
El Estado debe intervenir urgentemente para que se establezcan los mecanismos que faciliten la recolección de las mismas en recipientes adecuados y que se adopten las medidas para su reciclado y destino final ambientalmente seguro; por eso le decimos: